Dos hombres se follan a una señora madura. Normalmente en el porno las mujeres emiten algún tipo de gemido o chillido, pero aquí todo sucede en silencio. Era como si estuvieran follando no por placer, sino por el bien del proceso. Al menos se les ocurrió cambiar de posición hacia el final, porque si no era aburrido. Lo interesante es que la señora es muy atractiva y bien formada, pero no tiene ningún entusiasmo.
Ese es el tipo de profesión que se consigue. La profesión de profesor en Occidente no sólo se valora por su salario, sino que a las jóvenes alumnas no les importa montarte la polla con tal de que les pongas mejor nota. Esta vez tuvo suerte, dos rubias encantadoras, mmm...